Yo no estoy a favor de un sistema sanitario o educativo privado, porque al final iría todo a parar a manos de los ricos. Pero habría que ver cuánto de nuestros impuestos va a parar a las arcas de las pensiones, a los hospitales y colegios, y cuánto a los bolsillos de los corruptos. Y sí, entre los que evaden impuestos y los políticos (que evaden y dejarn evadir), al final los demás tenemos que pagar el pato.